En esta historia protagonizada por Mario Bautista:
Fotografía: Rikki Matsumoto. Dirección Creativa y Estilismo: Daniel Vásquez. Maquillaje: Jessica Díaz. Coordinación: Francisco José Contreras. Texto: Pablo Arámburu.
“Equis somos chavos”, “Un día eres joven y al otro ya te pegan las desveladas”. ¿Cuántas veces no hemos escuchado estas frases? Tal vez por aseveraciones como éstas creemos que el no desayunar, medio comer, desvelarnos, o inclusive, estar diario de fiesta no tendrá repercusión alguna en nuestra salud hasta el momento en que nos sintamos mal. Sin embargo, aunque no lo parezca, todo este tipo de factores te están afectando más de lo que te imaginas y aunque tu cuerpo no lo asimile de inmediato, probablemente si lo haga en unos años. Una de los cuantiosas partes humanas que más se ven afectadas por todos estos excesos es la piel.
Cuando no duermes, estás estresado, sueles tomar alcohol en exceso o no tienes buenos hábitos alimenticios la capacidad de procesar glucosa se altera, hay problemas de oxigenación en la sangre, pueden surgir anomalías cardiovasculares, inconvenientes en diferentes órganos y arterias y un sinfín de repercusiones más que cambian el ritmo de tu cuerpo y se reflejan en tu piel.
De acuerdo a un estudio realizado referente al sueño por la empresa de camas más grande de Gran Bretaña, Bensons for Beds, reveló que el no dormir provoca en el rostro un incremento en las líneas de expresión y arrugas, también propicia la aparición de manchas, la acumulación de bacterias, así como irritaciones en ella. No obstante, llevar una vida de excesos no se aleja de estos padecimientos, al contrario, los agrega y suma a la lista otros efectos negativos que van desde poca flexibilidad hasta inflamación en la dermis, entonces, ¿qué es realmente lo que pasa en la piel para que se genere todo esto?
El cortisol es una hormona esteroidea que se libera como respuesta al estrés, cuando una persona tiene una vida desequilibrada, de excesos y no tiene un descanso suficiente es probable que aumente el acné en la cara, y esto es porque cuando dormimos esta hormona disminuye, pero si te desvelas y no completas tu ciclo de sueño, produce un efecto contrario generando muchas veces granitos en el cuerpo.
La producción de colágeno también se ve afectada pues al no tener suficiente oxigenación en la sangre se desequilibra su producción generando poca elasticidad y firmeza en la piel, además que el aumento de cortisol influye en su descomposición. La vitamina A es un compuesto orgánico que mantiene y forma, en buen estado, diferentes tejidos del cuerpo. Pero el alcohol provoca que éstos se reduzcan generando resequedad y descamación en el área cutánea.
La deshidratación es una afección muy importante. Una vida de excesos altera el correcto funcionamiento de las hormonas, una de ellos es la antidiurética. Por ejemplo, cuando se toma alcohol, éste inhibe su producción lo cual genera que el riñón pueda absorber menos agua y exista una deshidratación. Su representación en la piel normalmente es en forma rugosa y descamada.
La acumulación de bacterias en la piel tiene que ver con una repercusión directa al sistema inmune, pues si éste está debilitado no puede generar al ciento por ciento diferentes sustancias protectoras. Los malos hábitos alimenticios también generan hinchazón y pueden destruir importantes proteínas del tejido como la elastina de la piel, por eso, lo mejor es tratar de llevar una dieta equilibrada y rica en nutrientes aunado a tomar mucha agua para que se mantenga hidratada la dermis.
Los efectos negativos en la piel y la salud en general son interminables y afectan a todos por igual, así que si consideras que algunos de estos hábitos los tienes implementados en tu día a día, tal vez es momento de cambiarlos y apostar por una larga vida porque seas chavo o no, tu salud no es “equis”.
