Sabemos que el cuidado de tu cabello es importante: un tema que ha trascendido a la rutina diaria del hombre contemporáneo. Se trata de nuestro mejor accesorio natural que, además de lucir bien, tiene que estar limpio y pulido. Sin embargo ¿te has puesto a pensar en lo que haces (o dejas de hacer) para cuidar tu cabello? La mayor parte ¡son mitos!
A continuación, te presentaremos los principales mitos que te has creído sobre el cuidado de tu pelo:
Seguramente te han dicho que lavar tu pelo todos los días puede dañarlo, que te saldrá caspa o que se te caerá y quedarás calvo. Estas declaraciones no son 100% reales -al menos no en todos- Muchas veces depende de tu tipo de cabello: lavarse diario no es malo si tienes el pelo muy fino, pero si tu pelo es seco, rizado, teñido o se irrita con facilidad no es muy recomendable que lo hagas frecuentemente.
Para los cabellos finos: opta por champús suaves que no contengan sulfatos agresivos ya que pueden dañar tu salud capilar.
Para los cabellos rizados: es bueno que, de vez en cuando, laves tu cabello solo con agua -sin uso de champú- Dale un respiro a tu cuero cabelludo.
“Cortarte el cabello hace que te crezca con mayor fuerza o con mayor rapidez” La velocidad de crecimiento depende de la genética y de tu alimentación, no de la frecuencia en que te lo cortes. No obstante, ayuda a tener una mejor salud capilar.
“El uso de la secadora provoca la caída del cabello” Es cierto que una exposición prolongada a altas temperaturas puede debilitar el cabello; sin embargo, el uso de secadoras y planchas no tiene porqué ser perjudicial si lo haces en la medida correcta, no excesivamente.
“Se me cae demasiado por cepillarlo” No es que se te caiga por cepillarlo, esos cabellos ya estaban desprendidos y al cepillarlo recopilas todo lo que ya no está sujeto al cuero cabelludo.
“No te arranques las canas porque se te pueden duplicar” Tal vez el mito más resonado, especialmente para los hombres. Es cierto que al llegar a cierta edad surge una despigmentación de las unidades foliculares: se trata de un fenómeno natural al que todos nos vamos a enfrentar en cierto momento, es una cuestión de edad y, una ves más, de genética. Así que no te preocupes por arrancarte esa cana, tarde o temprano llegarán, depende de ti como las luzcas.
Está claro que en el mundo de la belleza no existe una verdad absoluta y los métodos de cuidado no funcionan de igual manera en todas las personas. Lo que sí es cierto es que se trata de una cuestión de salud y bienestar. La clave para mantener tu cabello sano es mantenerte a ti sano: ¿Cómo? La alimentación es clave.
Una dieta saludable es fundamental para conseguir un pelo fuerte y reluciente. Las proteínas con alto valor biológico potencian, a medio y largo plazo, el crecimiento del cabello. Alimentos como verduras, legumbres, aguacate, frutos rojos o cítricos refuerzan las raíces del pelo, potenciando su crecimiento.
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