El rodillo de jade se popularizó en el año 2017, no solo por ser un producto de belleza novedoso y de beneficios esotéricos sino porque también resultaba ser bastante fotogénico y esto dio pie a increíbles fotos entre usuarios de Instagram -en su mayoría influencers o beauty bloggers-
Fue gracias a este estallido que muchas tiendas y marcas comenzaron a fabricarlos y el producto empezó a ganar fama, por lo menos entre las mujeres más vanguardistas en el mundo de la belleza. Con ello nada impidió que también hombres se interesaran por el producto convencidos de sus beneficios y sin grandes dudas o mayores inquietudes de que se tratara de un artículo destinado solo a mujeres. Después de todo, este rodillo tiene un propósito general y es estimular la circulación de la cara lo cual no depende de un género en particular.
La manera de utilizarlo es sencilla: empiezas masajeando tu cara en direcciones ascendentes -lo cual ayuda a tensar la piel hacia arriba- Lo importante es hacerlo placentero, debe sentirse como un masaje y no como una tortura o una sensación desagradable. Aunque en un principio este producto se usaba solo, muchas personas lo intensifican aplicando en el rostro aceites esenciales, sueros o cremas hidratantes, sosteniendo que los productos se absorben mejor y llegan a las capas más profundas de la piel.
Ahora, el verdadero beneficio está, por supuesto, en la repetición del masaje, pero hay quienes le atribuyen propiedades esotéricas argumentando que el jade desprende vitalidad y claro que por su baja temperatura contrae los vasos sanguíneos y desinflama casi al instante, lo cual lo hace idóneo para su uso matutino. A su vez, este rodillo se convierte en una herramienta anti edad liberando las tensiones de la cara que podrían causar arrugas y líneas de expresión. Muchas personas, a pesar de la naturaleza de esta piedra, lo potencian guardándolo en sus refrigeradores o neveras, esperando que la piedra se enfríe mucho más y así obtener resultados mucho más convincentes.
La demanda de este producto ha crecido en el occidente, pues se considera un secreto ancestral proveniente de China. Era usado en el siglo VII, por supuesto, con mayor misticismo y creencias curativas. Y es con este origen e historia lo que continúa innovándolo no solo es en jade, sino, también, en cuarzo rosa y amatista.