A los 30 años todos empezamos a experimentar envejecimiento facial: inicia la aparición de lo que llamamos signos de la edad y con ellos una serie de cambios en nuestra piel. La pérdida de colágeno es uno de estos principales cambios (hablando internamente) pues hace que la dermis se vuelva mucho más fina y, con base a esto, la elasticidad irá desapareciendo o haciéndose más débil, lo cual desembocará en flacidez. Visualmente esto dará luz a las famosas líneas de expresión y arrugas. Por otro lado, para los treinta nuestros huesos empiezan a volverse más porosos y sufren de una permeabilidad que da lugar a la pérdida de volumen, principalmente en nuestra cara.
Todo lo anterior se lee terrible; sin embargo, es una realidad que afortunadamente puedes enfrentar con un tratamiento que es uno de los secretos de la juventud: SCULPTRA. Por más de 20 años el ácido poliláctico (ingrediente principal de Sculptra) se ha usado en productos quirúrgicos y actualmente en cuestiones estéticas, propiamente, Sculptra es un bioestimulador de colágeno que se aplica en la capa más profunda de la piel para lograr la producción de dicho colágeno, tratando el contorno facial de manera global.
¿Los resultados?
Sculptra devuelve el volumen perdido, la elasticidad, la vitalidad, la suavidad y la calidad juvenil al rostro. El aspecto que da a la piel es totalmente natural: una ola de hidratación sana invade la piel y lo mejor es que previene futuras líneas de expresión y manchas.
El tratamiento puede llegar a ser muy similar al de los rellenos dérmicos, pero no debemos confundirnos. Sculptra es un medicamento que estimula directamente y de forma progresiva el colágeno dérmico. Ya que la sustancia con la que se trabaja es sintética y biocompatible. No hay necesidad de realizar pruebas de alergia previas a someterte a este procedimiento, bastará con que te pongas en manos de expertos dermatólogos para definir qué zonas de tu cara se van a trabajar. Posteriormente, solo será necesario limpiar muy bien el rostro, aplicar un poco de crema anestésica y al final se aplicará mediante inyecciones con finas agujas.
Los microscópicos cristales de Sculptra inducen una reacción inflamatoria leve debajo de la piel y los glóbulos blancos que rodean a estos microcristales atraen a los fibroblastos productores del colágeno. Para obtener los resultados esperados, se recomiendan 3 aplicaciones con un intervalo, entre cada una de ellas, de 20 días.
